Personalmente considero que la cultura aeronáutica en el país debe alentarse lo más posible, ya que las personas en general no tienen, o casi no tienen, conocimientos básicos de aviación. Esto, aunque no lo parezca, perjudica el trabajo de personas relacionadas a la aviación y también impide que nuestro hobby sea más abierto, conocido y bien visto, por las autoridades y por el propio público. Ya que, al no conocer de ciertos procedimientos, acciones, datos y reglas más a fondo, el público puede malinterpretar o sacar conclusiones equivocadas y por ende, generar desinformación.
Con esta premisa, y tomando en cuenta que nuestra Fuerza Aérea Ecuatoriana se encuentra en el mes de su aniversario número 102, la institución realizó el pasado Sábado 15 y Domingo 16 de Octubre una serie de eventos tanto en la capital, como en la urbe porteña.
En Guayaquil, la FAE organizó durante aquel par de días una retreta musical y exposición aeronáutica en el Malecón 2000 donde los habitantes de "La Perla del Pacífico" pudieron apreciar stands de las ramas de las Fuerzas Armadas, así como también de los diferentes escuadrones de aeronaves que pertenecen a la Fuerza Aérea Ecuatoriana.
Varias actividades se realizaron en Quito y Guayaquil por los 102 años de la FAE.
También se pudo apreciar de cerca uno de los helicópteros que la FAE tiene preservado. Un Bell TH-57A, versión naval del Bell 206, preservado por la FAE y de matrícula FAE-402 pudo ser apreciado por los participantes. Este helicóptero anteriormente se encontraba exhibido sobre el cartel de la Base Aérea Simón Bolívar junto al Aeropuerto José Joaquín de Olmedo pero fue retirado hace tiempo y trasladado dentro de la base. Ahora, sirve como maqueta para exposiciones y ceremonias de la Fuerza Aérea.
Sin duda, tanto el evento de Guayaquil, como el de Quito tuvieron una gran acogida por los ciudadanos de ambas ciudades. Debido a que resido en Quito y tuve la oportunidad de acudir a dicho display estático y feria aeronáutica les traigo un resumen fotográfico y vídeo de mi canal de youtube, enfocándome principalmente en las aeronaves que se pudieron apreciar durante aquel fin de semana.
Recordemos que en Mayo de este mismo año, en el Centro de Convenciones Bicentenario se realizó la "Feria Bicentenario" en la cual empresas, escuelas militares y diferentes ramas de las Fuerzas Armadas expusieron su material en stands interactivos con el motivo de conmemorar los 200 años de la Batalla de Pichincha. En este evento se expusieron aeronaves preservadas de la Fuerza Aérea así como también uno de los nuevos H145 de la misma, aparte de un helicóptero de la Aviación Naval y otro del Ejército Ecuatoriano.
Aeronaves preservadas de la FAE que se encontraban en la base aérea fueron la sensación de la feria.
Helicópteros del Ejército, FAE y Bomberos Quito también participaron.
En esta oportunidad la cita se dió de forma parecida, ya que en esta ocasión se llevó a cabo frente a la tribuna de la Base Aérea Mariscal Sucre en el antiguo aeropuerto de Quito. En este feria, hubo la participación de varios grupos artísticos, bandas de fuerzas armadas, empresas privadas auspiciantes y carritos de comida, aparte de juegos infantiles y los stands de escuelas de las FFAA, de diferentes escuadrones de la FAE, empresas auspiciantes, de aeropolicial, bomberos Quito e incluso de la Aviación del Ejército.
Pero sin dudas, las joyas de este evento fueron las aeronaves tanto de la FAE, Ejército y del Cuerpo de Bomberos de Quito que estuvieron presentes para que la ciudadanía las aprecie a detalle y de cerca y junto a oficiales de cada rama que estuvieron allí para brindar información y la historia detrás de cada una de las aeronaves, tanto en servicio como preservadas. Repasemos cada una de las aeronaves que formaron parte de la Feria Aeronáutica FAE 2022.
La entrada fue por el Colegio FAE No. 1 en la Av. La Prensa, desde ahí, se caminaba hasta la tribuna un par de minutos y lo primero que nos encontrábamos era al conocido Hawker Siddeley HS-748 Avro de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, que por muchos años sirvió como avión presidencial del Ecuador, por ello, el número "001" que lleva pintado en su fuselaje. Este avión con doble matrícula militar y civil FAE-684 y HC-AUK, se encuentra preservado aquí desde el cierre del antiguo aeropuerto y fue retirado de línea de vuelo en el mismo año del cierre de este.
Los Hawker Siddeley HS-748 "Avro" son aviones tubro hélice diseñados por la empresa británica Avro y posteriormente por la Hawker Siddeley del mismo país, los cuales fueron diseñados a finales de los 50s para ser un reemplazo de los Douglas DC-3 y como un avión STOL (Short Take-off and Landing). En Ecuador, estos aviones operaron desde los años 70s hasta Agosto de 2014 cuando fueron reemplazados por los nuevos CASA C-295. Estos, no solo operaron para la FAE, sino también para la aerolínea militar Tame cuando aún estaba en manos de la FAE. Algunos HS-748 fueron conservados y o preservados, para ser exactos un total de 3 HS-748 están preservados y uno se encuentra almacenado. Estos se encuentran en ciudades como Latacunga, Quito (este) y Manta. Los demás sufrieron accidentes y/o fueron canabilizados.
El primero que nos recibió, el Hawker Siddeley HS-748 "Avro".
Anteriormente este avión sirvió como avión presidencial del Ecuador hasta que llegaron los Sabreliner.
Este avión se encuentra preservado en el antiguo aeropuerto desde su cierre.
Como pueden ver, tiene tanto registro militar como civil.
Seguimos caminando y nos encontramos con los supersónicos de la FAE, el Kfir, el Mirage y el Jaguar. Los tres aviones preservados por la FAE para usarse como decoración ceremonias de ascensos y de aniversario y para ser apreciados por las personas durante ferias como esta.
El primero de todos, el "Cachorro de León", el IAI Kfir C2. El caza israelí que hizo historia en la FAE y, este en particular (el FAE-909) se encuentra preservado en los hangares de la Base Aérea Mariscal Sucre desde aproximadamente Septiembre de 2020 como una gran parte de los aviones que fueron expuestos en esta feria. Este Kfir C2 (anteriormente un Kfir CE) es uno de los 18 IAI Kfir que la FAE llegó a operar. Entre sus versiones monoplaza (CE y C2) operó 15 aeronaves monoplaza y 3 biplaza (TC2). Los primeros IAI Kfir se adquirieron en 1982 luego del conflicto del 81 con el Perú, y el 10 de marzo de 1982 se crea el Escuadrón 2113 Kfir.
Los IAI Kfir son uno de los aviones más recordados por su participación en el conflicto del Cenepa, esto debido a que el 10 de Febrero de 1995, un Kfir matriculado FAE-905 al mando del Cptn. Mauricio Mata derribó una Cessna A-37B Dragonfly de la Fuerza Aérea Peruana. El canopy del avión militar peruano aún se conserva en algún museo o base aérea del país, debido a que hay múltiples réplicas de ese mismo.
Al rededor del país se encuentran aproximadamente un total de 6 IAI Kfir preservados, dos de ellos se encuentran en Quito, este es uno y el segundo se encuentra en la entrada del museo aeronáutico, hay uno en Salinas, dos en la Base Aérea de Taura y uno en un regimiento militar de Atuntaqui, al norte del país.
Primera parada: Los supersónicos.
El "Cachorro de León" israelí, el IAI Kfir C2.
Los IAI Kfir llegaron a la FAE en 1982 y participaron activamente en el conflicto del Cenepa.
Un Kfir ecuatoriano fue el responsable del derribo de un Cessna A-37B peruano el 10 de Febrero de 1995.
Uno de los aproximadamente 6 IAI Kfir que se encuentran preservados en el país, este está en la entrada de la Base Aérea de Taura en Guayas.
A su lado, se encontraba el francés, Dassault Mirage F1JA. Este avión supersónico integró el Escuadrón de Combate No. 2112 "Cazadores" al que luego en épocas más recientes se incorporarían los Atlas Cheetah, hoy fuera de servicio. Los Mirage fueron adquiridos en 1979 y estuvieron en servicio hasta su dada de baja en el 2011 cuando ya habían acumulado en total más de 33.000 horas de vuelo.
Este avión también es recordado por su gran participación en la Gesta Heróica del Cenepa. También el 10 de Febrero de 1995, dos Mirage F1JA, el FAE-806 y FAE-807 piloteados por el Cptn. Carlos Uscátegui y el Mayor Raúl Banderas (respectivamente) fueron desplegados desde la Base Aérea de Taura hacia el Cenepa donde derribaron dos Sukhoi Su-22 de la Fuerza Aérea Peruana matriculados como 014 y 017. Por ello el 10 de Febrero es recordado por el aniversario de la Victoria Aérea del Cenepa y Dia día de la Aviación de Combate.
El Mirage preservado en la tribuna de la Base Aérea de Quito con matrícula FAE-813, quedó aquí tras el cierre del antiguo aeropuerto junto al FAE-808, este otro luego de un año del cierre del aeropuerto fue trasladado a Sangolquí donde reposa hasta la actualidad. En total en el país se pueden encontrar más de 10 Mirage preservados en el país, estos se encuentran en Taura, Quito, Guayaquil, Salinas, Sangolquí, Ambato, Latacunga. En Latacunga se encuentra un Dassault Mirage F1JE el cual es la versión biplaza del F1JA.
El segundo de los tres superósnicos, el Mirage F1JA.
Integraron en 1979 el Escuadrón de Combate No. 2112 "Cazadores" al que luego se integrarían los Atlas Cheetah en décadas posteriores.
También participaron en el Cenepa, cuando dos Mirage derribaron, el 10 de Febrero de 1995, a dos Sukhoi Su-22 peruanos.
Además, recordemos que también el Gobierno Venezolano del entonces presidente Chávez en 2009, nos donó un total de 6 aviones Dassault Mirage 50DV los cuales al llegar al Ecuador con más 30 años de servicio a sus espaldas pues no duraron mucho y fueron dados de baja debido a los problemas que presentaban sus asientos eyectores. Todos se encuentran preservados o almacenados. De lo que sabemos existe uno en Latacunga y otro en Taura, aunque es casi seguro que todos los demás aviones quedaron en Taura almacenados.
Junto al Mirage completamos la flota de supersónicos históricos de la FAE con el Sepecat Jaguar ES, matriculado FAE-339. Estos modelos anglo-franceses fueron el primer caza supersónico en entrar en servicio con la FAE. Los Jaguar fueron adquiridos en 1974 luego de que la FAE considerara el comprar aviones como el F-4 Phantom, el English Electric Lightning, el Hawker Hunter y el Dassault Mirage 5, finalmente se decidió por añadir a la flota los Jaguar. El 14 de Enero de 1977 llegan las primeras unidades de este tipo a la Base Aérea de Taura para incorporarse al Escuadrón de Combate 2111 Jaguar, iniciando así la era supersónica en Ecuador.
Existen más de 10 Mirage preservados en todo el país.
En 2009, el gobierno de Venezuela nos donó 6 Mirage 50DV pero no duraron mucho ya que tenían más de 30 años de servicio a sus espaldas.
En total, nuestra Fuerza Aérea llegó a tener un total de 12 Sepecat Jaguar, de todos esos 10 monoplaza o Jaguar ES y apenas 2 biplaza, Jaguar EB. Aproximadamente 4 de estos Jaguar sufrieron accidentes entre el año 1988 y 1990, el más relevante y más recordado fue la tragedia de La Atarazana, en Guayaquil cuando el FAE-340 realizaba vuelos sobre Guayaquil debido al desfile por los 69 años de la FAE. La aeronave cayó sobre 6 casas de esta zona de la Urbe Porteña matando a 8 personas en tierra y al piloto, el Cptn. Eduardo Arias.
A pesar de esto, el Sepecat Jaguar es un avión legendario el cual nos abrió las puertas al mundo de la aviación supersónica y sentó las bases para el posterior conflicto del Cenepa donde aviones como este y los posteriores brillaron. Actualmente existen 5 Sepecat Jaguar preservados por el país, 2 se encuentran en Quito, 1 en Salinas, 1 en Taura y existe un biplaza preservado en el COAD en Guayaquil. Aparte de estos, el restante de los Jaguar que sobrevivieron al tiempo y los accidentes muy probablemente se encuentran almacenados en la Base Aérea de Taura.
Los Sepecat Jaguar fueron los primeros aviones supersónicos de la FAE, entraron a esta en 1977.
Se analizaron varios aviones para la FAE en esa época y se decidió por los Jaguar, un modelo anglo-francés.
El Sepecat Jaguar fue la piedra angular en donde se basó la aviación supersónica ecuatoriana.
Existen varios Sepecat Jaguar preservados en el país, principalemente en bases aéreas como monumentos o "gate guards".
Un Speecat Jaguar EB biplaza visto en el COAD de Guayaquil.
Siguiendo con el recorrido, llegamos a los primeros helicópteros, los de la Aviación del Ejército, el primero el AEE-465. Un Aérospatiale AS332B Super Puma con unos preciosos colores de camuflaje verde lagarto, el único del Ejército Ecuatoriano en aún llevar estos colores los cuales lo hacen de los helicópteros más llamativos que actualmente vuelan en Ecuador. Este esquema de camuflaje es realmente el "house livery" o livery de fábrica de la Aerospátiale que tenían estos helicópteros al momento de ser entregados.
Los Super Puma comenzaron a llegar al Ejército del Ecuador en 1985 y hasta la actualidad llegaron a operar 8 aeronaves de este tipo, aproximadamente 5 de estos helicópteros Super Puma se encuentran aún como parte de la flota de la AEE en la BAE #15 "Paquisha" o La Balbina.
Helicópteros del Ejército participaron de esta cita aeronáutica.
El Aérospatiale AS332B Super Puma del Ejército Ecuatoriano siendo visitado por los participantes.
Su camuflaje tipo "lagarto" lo hacen bastante llamativo a la vista.
El AEE-465 se encontraba en mantenimiento hasta hace algunos meses atrás, pero ya se encuentra operativo.
Junto a él, su hermano mayor, el Aérospatiale SA330L Puma, luciendo colores blancos. Actualmente es el único SA330 Puma que sigue en servicio en el país y su esquema totalmente albino según un fuerte rumor es debido a que en su tiempo iba a ser parte de una misión de las Naciones Unidas, las cuales pintan a las aeronaves que usan con este color característico blanco y las palabras "United Nations" y sus siglas en inglés pero esto nunca llegó a pasar con el AEE-458 y quedó así con estos colores.
Una interesante anécdota de este mismo helicóptero es que se tiene conocimiento de que anteriormente llegó a operar en Romania como un helicóptero VIP militar, el cual incluso tenía baño en su respectiva configuración. Al momento de ser entregado a la AEE, este helicóptero voló con tripulación ecuatoriana de camino al país, pero se cuenta que dicho aparato pasó por una zona de guerra en la cual fue interceptado, obligado a aterrizar y sus pilotos ecuatorianos fueron capturados como prisioneros de guerra. Tras varias negociaciones diplomáticas, el equipo y el helicóptero fueron liberados y continuaron su travesía al Ecuador.
El Puma "albino" del Ejército Ecuatoriano también fue una gran atracción.
Se dice que este helicóptero iba a participar en una misión de las Naciones Unidas, por eso su color blanco, pero esto nunca se concretó.
Este es el único SA330 Puma que queda volando en el país.
Detalle de la cabina del AEE-458.
Este helicóptero al igual que los Mi-171 y los Super Puma tienen base en La Balbina.
El Ejército llegó a tener 3 de estos helicópteros, que al ojo pueden ser bastantes similares a los Super Puma. De los 3 helicópteros uno sufrió daños durante un aterrizaje de rutina, otro fue dañado en la explosión que ocurrió en los hangares de La Balbina en el año 1997 y se encuentra aún allí almacenado y el tercero es el que sigue volando y pudimos apreciarlo en la Feria Aeronáutica FAE 2022. Tanto al Super Puma, como al Puma, la gente pudo acceder, tomarse fotos dentro y fuera de la aeronave y posar con los cascos de los pilotos del Ejército en la cabina de mando.
Aparte del Ejército, la Fuerza Aérea Ecuatoriana operó dos de estas aeronaves, matriculadas FAE-226 y FAE-227, que cumplieron misiones de rescate y entre 1974 y 1994 cuando fueron dadas de baja de la institución.
Posteriormente, un helicóptero que resaltaba por su hermoso color rojo, el "Bravo Quebec 1 0 2", el helicóptero del Cuerpo de Bomberos de Quito. Con su propio stand con varios objetos recreativos e interactivos, los bomberos de la capital explicaban de sus procedimientos para rescate de personas, evacuación aeromédica, extinción de incendios, etc. Junto al helicóptero se encontraba un "Bambi Bucket" que es usado para cargar agua y extinguir fuegos forestales.
El Cuerpo de Bomberos de Quito participó con su helicóptero, el BQ-102.
Las personas pudieron conocer sus capacidades para rescate, evacuación y extinción de incendios.
El BQ-102 tiene la capacidad de extinguir incendios gracias al uso de Bambi Buckets.
Fue adquirido en 2016 y tiene su base frente a la Base Aérea Mariscal Sucre.
Este helicóptero se incorporó a finales de 2016 a los Bomberos de Quito pero bajo la matrícula de CB-102, así estuvo volando por un tiempo antes de cambiar a matrícula civil HC-CRE con la cual se mantuvo hasta hace apenas unos años cuando se volvió BQ-102, matrícula que hasta ahora conserva. El BQ-102 es un helicóptero italiano Agusta A109K2 construído en 1995 que ha pasado por aerolíneas Agusta Westland Philadelphia (N109TA), Helitalia (I-HBHB) y DRF Luftrettung (D-HABI). Sin duda su participación fue una pequeña cereza al pastel de toda la feria.
Los stands al rededor de esta primera sección de la feria se encontraban centrados en puestos de comida, escuadrones y escuelas de aviación militar a lo largo del país. Sin duda, uno de mis favoritos personalmente, fue el stand del Escuadrón de Combate 2211 "Arpías" basado en el Ala de Combate 21 de Taura. Donde se pudieron apreciar instrumentos de aeronaves, municiones y demás implementos para la aviación de combate, sin embargo, el "eye-catcher", para mí, de este stand fue una sección del rotor de cola de un Bell 206 de la FAE, matriculado como FAE-408.
Posteriormente llegamos al hangar de la FAE donde generalmente permanecen almacenados una gran mayoría de las aeronaves preservadas y expuestas aquel fin de semana. Aquí se encontraban la mayoría de stands de Escuelas de Aviación, Aviación del Ejército, ESMA, Aeropolicial, Armada del Ecuador, ETFA, DIAF, CIDFAE, GOEFA, y otras ramas de las FFAA y empresas auspiciantes.
Los stands se ubicaron fuera y dentro de los hangares donde los aviones preservados se guardan.
Una parte perteniente a la cola de un Bell 206 matriculado FAE-408.
En los stands hubieron modelos a escala de aviones de la FAE.
También se exhibieron drones de escuelas de las FFAA.
Se expusieron cuadros con ilustraciones de las aeronaves de la FAE.
Y sin duda este modelo a escala de un Kfir fue una joya vista por todos.
Aunque no formaron parte de esta Feria Aeronáutica, se pudieron apreciar de lejos a dos Beech T-34 Turbo Mentor de la FAE. Uno de ellos preservada desde el 2021 en un pedestal cerca de los hangares, el otro sin motor fue
En este sitio también se encontraba el Airbus Helicopters H145M (FAE-1254) que llegó directamente desde su hogar en el Ala de Combate 21 Taura hacia La Balbina y posteriormente al antiguo aeropuerto para participar de esta Feria Aeronáutica. Expuesto con una artillería y diferentes equipos de combate y rescate, los jóvenes y adultos pudieron acercarse a él y tomarse fotos junto con todos sus equipos y con este gran y eficiente helicóptero.
Fabricado por Airbus en 2021, el Airbus H145M es un helicóptero versátil, eficiente y diseñado especialmente para operaciones en sitios "high and hot", precisamente como en la sierra ecuatoriana. La FAE adquirió un total de 6 de estos helicópteros a la empresa europea convirtiéndose así, en el primer cliente militar en ordenarlo en Sudamérica.
En Mayo de 2021 llegaron al país los primeros 3 H145 para la FAE al Aeropuerto José Joaquín de Olmedo abordo de un Antonov AN-124 de Antonov Company. Estos tres primeros helicópteros fueron matriculados FAE-1251, FAE-1252 y FAE-1253. La otra mitad de helicópteros llegó en Diciembre de 2021 completando así la flota de 6 helicópteros, los últimos fueron matriculados siguiendo la serie: FAE-1254, FAE-1255 y FAE-1256.
Uno de los Beech T-34 Turbo Mentor de la FAE preservado en un estante y con luces instaladas.
Este Turbo Mentor lastimosamente no participó de la feria activamente pero se lo pudo ver a lo lejos.
Vista de frente del H145 de la FAE, conocidos como "libéula" por su gran parecido con esos insectos en su parte frontal.
Los participantes también pudieron entrar y fotografiarse junto a este helicóptero, el más moderno que opera en el país para la FAE.
Los Airbus H145 forman parte del Escuadrón de Combate 2113 "Arpías" basados en Taura.
Posteriormente, saliendo de este hangar empezamos la que yo llamaría la zona del recorrido histórico de la FAE. Donde se expusieron aeronaves que formaron parte de la flota histórica de la Fuerza Aérea.
Primero, el North American T-6 Texan, matriculado como FAE-20310 el cual se encontraba en el museo aeronáutico y fue restaurado durante el aniversario 100° de la FAE. Los T-6 Texan son aviones monomotores que llegaron al país en Marzo de 1942 en un lote de tres y se incorporaron a la FAE conjuntamente con tres Ryan PT-22, seis Curtiss-Wright CW-22 Falcon y seis Fairchild PT-19A Cornell.
En Ecuador, los T-6 Texan superaron los 30 ejemplares, algunos de ellos sufrieron accidentes e incluso dos de ellos sufrieron una colisión aérea en Marzo de 1944. Pocos fueron los que sobrevivieron para ser preservados, la mayoría salieron de servicio y fueron canabilizados o vendidos, así que con el paso del tiempo solo quedaron pocos ejemplares.
Hasta hace poco existían dos T-6 en Salinas pero que desaparecieron en la pasada década. Existen hace tiempo dos en el museo aeronáutico, uno de ellos fue el expuesto aquí. Existía un tercero hasta hace pocos años atrás en el Colegio Técnico Aeronáutico "Coronel Maya" cerca a la Base Aérea Mariscal Sucre, pero su paradero o destino actualmente es desconocido.
Los T-6 Texan llegaron al país en 1942.
Muy pocos sobrevivieron al pasar de los tiempos, en el museo de Quito quedan los únicos 2 en el país. Aunque en Salinas y aquí en Quito quedaban más pero desaparecieron.
El siguiente expuesto es fabricado por la misma North American, pero se trata del North American T-28 Trojan (FAE-91545). Entraron en servicio para el Ecuador en 1968, completando una flota de 20 aviones de este tipo caza-bombarderos. De estos 20 aviones, la mitad eran de la versión T-28A y la otra mitad eran T-28D. Los T-28A formaron parte del Escuadrón de Caza-Bombardeo 2112 y los T-28D operaron para el Escuadrón de Combate 2113.
Estas dos versiones se pueden diferenciar al ojo por las palas de su única hélice. Mientras el T-28A tiene dos palas, el T-28D lleva 3 palas.
De todos los T-28 que operaron en el país, apenas entre 3 y 4 se conocen que sobrevivieron al paso del tiempo. Dos T-28 se encuentran en el Museo Aeronáutico de la Base Aérea en Quito, un T-28A (el exhibido en la feria) y un T-28D. El tercero se encontraba deteriorado en el Aeropuerto José Joaquín de Olmedo de Guayaquil donde junto a un Sikorsky de la FAE (del que hablaremos más adelante) y junto al Canadair CC-106 Yukon de Andes, su futuro es incierto de donde pudo haber terminado. Y el cuarto, un T-28A, se encontraba en "El Nido del Cóndor" en la Escuela Superior Militar de Aviación (ESMA) de Salinas, pero fue retirado y reemplazado de su "estante" por un Turbo Mentor, y actualmente se encuentra junto a unos hangares esperando un próximo puesto de honor.
Posteriormente, se encontraban dos ejemplares del que a mí parecer es de los aviones más conocidos y emblemáticos en la FAE, no solo por su servicio sino también por su característica pintura de tiburón y su gran presencia en el país durante décadas pasadas. Estos son, los Lockheed T-33 Shooting Star (FAE-945 & FAE-622), los cuales entre 1956 y 1996 tuvieron un record histórico de horas de vuelo en la historia de la Fuerza Aérea Ecuatoriana y que formaron parte del Escuadrón de Combate 2313 "Tiburones" en la Base Aérea Eloy Alfaro de Manta.
El Trojan que se expuso en la Feria Aeronáutica fue repintado en 2020.
A pesar de que antes mostraba registro FAE-43233 y ahora dice apenas TB-229, este T-28 originalmente fue el FAE-91545.
Uno de los más conocidos y abundantes de la FAE, el T-33.
En la Feria Aeronáutica se exhibieron dos aviones de este tipo, aunque uno de los dos tenía un cartel que explicaba que era un Lockheed F-80, esto es errado pues ambos son modelos T-33. Ya que los únicos 2 F-80 que quedaron en el país se encuentran preservados en Taura. Esto debido a que prácticamente todos los F-80 fueron devueltos y fueron muy pocos los que quedaron aquí.
Volviendo al T-33, el Ecuador tuvo una gran flota de estos aviones que llegaron a ser poco más de 50 ejemplares en sus años de operación. Algunos de ellos eran apodados como "bala de plata" por su alta velocidad y maniobrabilidad (a pesar de ser aviones subsónicos), y por su característico color plata que antes los recubría, posteriormente este esquema pasaría a ser el camuflaje militar acompañado por la boca de tiburón y el cual usaron hasta su retiro en Noviembre de 1996.
Muchos oficiales y pilotos de nuestra Fuerza Aérea fueron instruidos en este tipo de aeronaves, las cuales por su gran maniobrabilidad eran de las preferidas para volar. Después de su retiro en 1996, la mayoría de estas aeronaves fueron preservadas como monumentos a lo largo del país, unas pocas se accidentaron y otras han quedado almacenadas en el Ala de Combate 23 en Manta.
En esta feria se exhibieron 2 aviones de este tipo, este en concreto se encontraba en el COAD de Guayaquil, donde ahora está el Jaguar biplaza de la foto de arriba.
Al principio los T-33 eran pintados de color plata, por eso recibieron el apodo de "balas de plata".
Sin duda, el T-33 es el avión más abundante que se mantiene preservado en el país. Aquí en Quito y sus alrededores existen por lo menos 5 de estas aeronaves preservadas. Y existen muchos más a lo largo del país que se contabilizan en un total de por lo menos 32 T-33 de los que se tiene registro, muchos en Bases Aéreas como monumentos o "gate guards" o en plazas, parques y sitios recreativos como es el caso de los T-33 en Ibarra, Quevedo, Píllaro, Guaranda, Cayambe, Loja, etc. Existen otros muchos en bases aéreas como en Manta, Latacunga, Quito, Guayaquil, Taura. En fin, casi en cada rincón del país podemos encontrar uno de estos aviones decorando un sitio recreativo o concurrido de una ciudad o pueblo, sin duda para mí de los aviones más emblemáticos de la FAE.
Existen muchos T-33 en el país que fueron preservados como "gate guards" o monumentos, como este en Ibarra.
El Lockheed F-80/P-80, bastante similar al T-33, también operó en la FAE pero apenas 2 quedaron perservados ya que todos fueron devueltos o vendidos.
Muchos T-33 al rededor del país están siendo restaurados y repintados para mantener su historia viva.
El T-33 de la Base Aérea Mariscal Sucre que se puede ver en la Av. La Prensa en Quito por un tiempo llevó mascarilla debido a la pandemia de Covid-19.
Siguiendo con nuestro recorrido encontramos otra pareja de aviones que son recordados conjuntamente con los T-33 como parte de los escuadrones "subsónicos" de la FAE. Estoy hablando del BAC Strikemaster y del Cessna A-37B Dragonfly, dos aviones que también son recordados con gran honor dentro de la FAE, pero hablemos de cada uno.
El BAC Strikemaster fue diseñado por la empresa de Reino Unido, la British Aircraft Corporation. Estos modelos entraron a la Fuerza Aérea Ecuatoriana en el año 1972 e integraron el Escuadrón de Combate 2113 pero posteriormente se unirían al Escuadrón de Combate 2313 "Halcones" localizado en la Base Aérea de Manta.. Un total de 24 de estos aviones ingleses integrarían la flota subsónica de nuestra fuerza aérea, pero una gran parte estos equipos sufrieron incidentes y accidentes los cuales inutilizaron varias de estas unidades entre los años 1973 y 2009.
El Strikemaster fue un avión emblemático de la FAE.
Al rededor del país hay aproximadamente 6 BAC Strikemaster preservados o que aún se mantienen medianamente enteros. Existe uno en Quito, este, otros en Manta, Bahía de Caráquez, Salinas y Taura. En la Base Aérea de Taura se encuentra el Strikemaster apodado como "vampiro" por su característico color negro.
A su lado, el Cessna A-37B Dragonfly, matriculado como FAE-392 y bautizado como "Tiwintza" en honor a su legado y acciones heroicas durante el conflicto con el Perú. El 7 de Febrero de 1995, durante ataques a puestos militares peruanos, este exacto A-37 fue atacado por artillería antiaérea y un misil peruano alcanzó el ala derecha dañando sistemas vitales. Gracias a un golpe de suerte y gran pericia, el avión logró retornar al Aeropuerto de Macas donde se encontraban basados los Dragonfly durante dicho conflicto armado. Los medios de comunicación peruanos dieron este avión como "derribado". Sin duda, una de las mejores piezas que se exhibieron durante esta Feria Aeronáutica.
Este Dragonfly fue alcanzado por un misil peruano en 1995, pero logró retornar a Macas a pesar de sus daños en su ala.
Por dicha hazaña, este A-37B fue posteriormente bautizado: "Tiwintza".
Los Cessna A-37B Dragonfly son aviones de combate a tierra fabricados por la estadounidense Cessna y que sirvieron en el país entre 1975 y 2009. Las primeras 12 unidades de Dragonfly llegan a la Base Aérea de Taura en 1975 pero posteriormente se unirían al Escuadrón de Combate 2311 "Dragones" con base en el Ala de Combate 23 de Manta.
En 2014, aproximadamente 3 Dragonfly que aún se encontraban en plena capacidad de operación y varios repuestos de dichos aviones fueron donados a la Fuerza Aérea Uruguaya. En Uruguay ya se operaban dichos modelos hace varios años atrás por lo que los 3 A-37 ecuatorianos ayudaron a ampliar su capacidad operativa.
Varios Dragonfly fueron preservados, aunque sin duda el FAE-392 de Quito es el más importante de todos, existen ejemplares de este avión de combate en todo el país. En total 19 A-37 se pueden encontrar desperdigados por el país en lugares como Manta, Quito, Taura, Píllaro, Latacunga, La Maná, Sigchos, Zumbi, Gualaquiza, Azogues, Palenque y Salinas. Algunos de ellos fueron preservados incluso con luces interactivas que se encienden cuando la luz del Sol se pone, ejemplo de eso son los preservados en Zumbi y Palenque.
En 2014, el Ecuador donó 3 Dragonfly a Uruguay que aún tenían años por volar.
Vista de un Dragonfly de la FAE preservado en Latacunga cerca al aeropuerto.
Finalmente, nos encontramos con el único helicóptero de la FAE preservado en el país, un Sikorsky H-19B Chickasaw. Estos helicópteros fueron manufacturados bajo licencia por Westland Aircraft en Reino Unido, Agusta en Italia, Mitsubishi en Japón y Bell en Estados Unidos y llegaron al país por primera vez en Junio de 1968 un total de 6 de estos helicópteros para reforzar la capacidad de rescate, búsqueda y salvamento del país. Se pusieron en servicio del Escuadrón de Rescate y Salvamento 2113 en la Base Aérea de Taura.
En el país únicamente queda este helicóptero preservado de los 6 que llegó a operar nuestra fuerza aérea, es incierto el paradero y destino de los otros 5 pero hasta hace pocos años, un Sikorsky H-19 más en estado bastante deteriorado se podía ver descansando junto a un T-28 Trojan también muy deteriorado (y del que hablamos antes) y al Canadair CL-66 Yukon de Andes en el Aeropuerto José Joaquín de Olmedo, junto a la Base Aérea Simón Bolívar. Tanto este H-19 como el Trojan desaparecieron y probablemente fueron canabilizados y el Canadair fue llevado a Cuenca donde se encuentra hoy.
Aparte de todos estos aviones preservados y helicópteros activos, también se tenía previsto una exposición de aviones ultraligeros que vendrían desde el Aeródromo de Tabacundo hasta la Base Aérea Mariscal Sucre para participar, pero debido a varios asuntos con la DGAC de Ecuador esto no se pudo lograr.
Sin duda, la Feria Aeronáutica 2022 nos trajo una mirada al pasado y presente de nuestra fuerza aérea y sin duda contribuye de alguna manera a nuestra identidad, nuestra cultura aeronáutica y nuestro conocimiento general. Son esta clases de eventos y ferias los que se deben fomentar y realizar de manera más continua con el fin de informar a la ciudadanía y que nuevas generaciones se apasionen por conocer la aviación ecuatoriana, su pasado, presente y futuro.
Los invito a mirar el video en mi canal de Youtube acerca de esta Feria Bicentenario donde podrán ver más de primera mano cada aeronave que participó de dicho evento. Si les gusta el contenido pueden dejar su like y suscribirse, siempre ayuda. Cualquier comentario es siempre bienvenido.
El último del recorrido: el Sikorsky H-19B Chickasaw.
Este es el único H-19 que queda en el país, los otros 5 desaparecieron y fueron canabilizados seguramente.
Este helicóptero sirvió para rescate, evacuación y búsqueda con el Escuadrón de Rescate y Salvamento 2113 de Taura.
Actualmente los Agusta AW-119 Koala de la FAE funcionan para SAR (Search And Rescue).
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